Derechos humanos: nuestro posicionamiento
Nuestro compromiso con el respeto de los derechos humanos
Como empresa familiar activa a nivel internacional, somos conscientes de nuestra responsabilidad hacia nuestros empleados, el medio ambiente y la sociedad. Por ello, nos comprometemos a cumplir con los estándares sociales, fortalecer los derechos humanos y prevenir violaciones de derechos humanos.
Desde hace 125 años, Miele es sinónimo de electrodomésticos y máquinas comerciales de alta calidad como ninguna otra empresa y se considera el epítome de productos fiables y duraderos. Entre los valores inamovibles de nuestra empresa se encuentra el trato respetuoso y responsable tanto a los empleados como a los proveedores. La consideración de los derechos humanos es una cuestión de rutina en Miele y un principio clave de la cultura corporativa.
Implementación de SA8000 y del código de conducta durante muchos años
Miele también exige a sus proveedores que cumplan con los criterios sociales. Todos los proveedores de Miele en todo el mundo deben comprometerse a cumplir con los criterios anteriores dentro de su propia organización de acuerdo con la norma social SA8000 reconocida internacionalmente, y también deben supervisar el cumplimiento por parte de sus propios proveedores. Además de esto, los principios y requisitos contenidos en el código de conducta para proveedores son una parte integral de las relaciones comerciales entre Miele y sus proveedores. Los proveedores aceptan los principios establecidos con más detalle que cubren los derechos humanos y de los empleados, la protección del medio ambiente, las prácticas comerciales éticas y la integridad corporativa, las cadenas de suministro responsables y la diligencia debida como estándares mínimos. También tienen la obligación de garantizar que estos principios y requisitos también se apliquen a las estructuras de la cadena de suministro anteriores.
Análisis de riesgos
En lo que respecta a los proveedores, Miele supervisa y adapta periódicamente su proceso de análisis de riesgos, establecido desde hace años. Para ello, se evalúa a los proveedores directos en función de su potencial de riesgo sobre la base de índices de riesgo externos y de información adicional disponible dentro de la empresa (incluidos conocimientos y experiencias concretas) y se les asigna una categoría de riesgo. Esta priorización constituye la base para una gestión de riesgos y acciones centrada y proactiva por parte de Miele. En función de la clasificación de riesgo de un proveedor, esto da lugar a una variedad de medidas diferentes, hasta inspecciones anuales en sitio para verificar el cumplimiento de los criterios y estándares mínimos requeridos.
En términos de procesos, Miele realiza el análisis de riesgos de forma regular y lo documenta en consecuencia, al menos una vez al año. Además, existe un análisis de riesgos ad hoc cuando lo requiere la evaluación de riesgos de Miele o cuando existe una preocupación inmediata por una violación de las obligaciones, incluso por parte de proveedores indirectos. Si, a pesar de las debidas precauciones, hay motivos para creer que las actividades comerciales de Miele pueden tener consecuencias negativas para los derechos humanos, Miele puede utilizar su proceso de escalada establecido para analizar, modificar y/o corregir el comportamiento, lo que puede incluir, como último recurso, la rescisión de los vínculos comerciales.
Procedimiento de quejas
Miele anima a sus empleados a denunciar posibles infracciones de esta declaración de política sobre derechos humanos a través de los canales de denuncia existentes o los procesos de resolución de disputas. Estos incluyen la gerencia local, los departamentos de recursos humanos pertinentes y la línea directa de cumplimiento. Nuestros socios y terceros tienen varios canales en www.miele.com a través de los cuales denunciar posibles infracciones de esta declaración de política sobre derechos humanos, incluso a través de un defensor del pueblo.
Áreas de responsabilidad
La responsabilidad general de implementar esta declaración de política recae en el Comité Ejecutivo de Miele, compuesto por seis personas. La responsabilidad de la debida diligencia en materia de derechos humanos recae en la gestión pertinente de las distintas funciones y departamentos dentro del Grupo Miele con respecto a las tareas y responsabilidades individuales. Esto garantiza que cada área dentro de la empresa tenga claras sus propias responsabilidades en materia de defensa de los derechos humanos y la implementación diaria de medidas, tanto dentro de su propio campo de negocios como en la cadena de suministro. La coordinación y la gestión generales están a cargo de un grupo de trabajo central, encabezado por los departamentos de Sostenibilidad y Asuntos Regulatorios y Legal y Cumplimiento.
Comité Ejecutivo de Miele